Mente, cuerpo y espíritu: sensaciones y beneficios de estar en movimiento

Entrevistamos a Rosana Gogorza, médica Neuróloga (MN 1695), para que nos cuente cuáles son los beneficios y la recompensa que aparece después de ponernos en movimiento.

¿Te pasó alguna vez estar sin ganas de nada? ¿Notás la diferencia después de que ponés el cuerpo en movimiento? A veces la falta de energía puede deberse a la quietud. El sentir agotamiento, desmotivación, descanso no reparador, falta de voluntad para las acciones y muchas otras sensaciones son protagonistas a la hora de encontrar excusas para no entrenar el cuerpo.

En el Mes del Movimiento y para seguir concientizando de su importancia, entrevistamos a Rosana Gogorza médica Neuróloga para que nos cuente cuáles son los beneficios y la recompensa que aparece después de ponernos en movimiento.

 

Una vez que el cuerpo comienza a moverse, se puede disfrutar. ¿Por qué?

Cuando nos conectamos con el movimiento el cerebro humano tiene la capacidad de producir cuatro sustancias naturales relacionadas con la felicidad, el placer, la relajación y el alivio del dolor físico y emocional:

Endorfinas

Tienen la capacidad de cambiar nuestro estado de ánimo ya que actúan como analgésicos y activan los centros de placer, creando situaciones satisfactorias que contribuyen a disminuir el malestar.

 

Serotonina

Es conocida como la hormona del bienestar, aumenta la concentración y la autoestima. También ayuda a disfrutar de un sueño reparador y pone en marcha el reloj interno del cuerpo. Si el organismo no la produce en cantidad suficiente, se puede experimentar una sensación de desánimo e insomnio.

 

Dopamina

Inunda la sinapsis entre neuronas cuando sucede algo gratificante; es responsable de ese torrente de alegría cuando se alcanza un objetivo o una tarea resulta exitosa. Tiene muchos aspectos positivos, como por ejemplo, favorecer el estado de alerta. La mejor forma de elevar la dopamina es establecer objetivos a corto plazo o dividir en pequeñas metas aquellos objetivos que son a más largo plazo, y celebrar cuando uno los cumple.

 

Oxitocina

Aumenta la empatía y la confianza, regula la frecuencia cardíaca, disminuye la presión arterial, el estrés y la predisposición a adicciones (alimentos, drogas, alcohol, juego, etc). La oxitocina, conocida como la “hormona del amor”, se libera ante momentos placenteros de la vida, como cuando disfrutamos de una reunión con amigos, y ante simples contactos físicos que establecen lazos de apego.

Comenzar una actividad física en compañía puede ser una excelente iniciativa.

 

¿Cómo activar estas 4 sustancias en tu organismo?

La propuesta es que te enfoques y empieces o aumentes tu actividad física espontánea y planificada de entrenamiento. Pequeños objetivos, mantenidos durante unas 4 semanas para que se transformen en hábito.

8 beneficios de estar en movimiento

✅ La formación de nuevas neuronas.

✅ Mayor atención.

✅ Aumento del aprendizaje y de la memoria.

✅ Descanso reparador.

✅ Mejor estado de ánimo.

✅ Menos queja.

✅ Fortalecer las defensas.

✅ Prevención del envejecimiento cerebral.

 

Recordá que la actividad física es cualquier movimiento del cuerpo que exija gasto de energía.

 

  • Utilizá el transporte público, bajá unas cuadras antes del destino y caminá.

  • Realizá tareas domésticas diarias de manera vigorosa: barrer, ordenar, limpiar.

  • Bailá en momentos libres.

  • Reunite con amigos en una caminata.

  • Si es posible, subí escaleras en lugar de utilizar el ascensor.

  • Realizá pausas activas durante la rutina laboral.

  • Hablá por teléfono parado o caminando.

 

¡Podés empezar hoy mismo!

 

Fuente: Rosana Gogorza, Médica Neuróloga (MP 1695).