3 historias de emprendimientos que nos inspiran a ir por nuestros sueños

Empezar un negocio y seguir en carrera es todo un desafío, pero cada segundo de esfuerzo lo vale porque es un mundo lleno de satisfacciones. Te contamos el recorrido de Dani Cimma, Rama Somos y No Kiss Baal, tres marcas que iniciaron su camino a partir de un emprendimiento.

Muchas veces, se emprende a partir de una necesidad: porque el producto que queremos desarrollar no existe y le hace sentido a nuestro estilo de vida o porque queremos darle un giro a nuestro rumbo profesional. Confiar en vos y en tu proyecto es el primer paso. El segundo, construir un equipo y explorar las nuevas tendencias de manera constante para estar siempre adelante. 

En MÁS OSDE, descubrimos 3 historias de emprendimientos con un impacto saludable que queremos que conozcas para inspirarte, si todavía no diste el gran paso, o para sentirte en compañía si estás surfeando las olas del emprendedurismo.

 

Dani Cimma: de la puericultura a la creación de un producto pionero

 

Dani Cimma

Dani Cimma inició su vida profesional como Licenciada en Relaciones Públicas y, luego de un tiempo y a partir de su interés en la salud, su mente y corazón curiosos la llevaron a formarse como Puericultora para dar sostén a las familias durante el embarazo, el parto y el puerperio. 

 

En mayo de 2018, lanzó al mercado un producto que no existía y que hoy se volvió clave para amamantar: el almohadón de lactancia ergonómico. La idea surgió a partir de la necesidad de desarrollar un almohadón que fuera ergonómico y que verdaderamente pudiera acompañar a las madres de manera funcional en el momento de dar la teta. Lo desarrolló junto a su mamá y a un especialista en ortopedia. Registraron el producto como un modelo industrial y hoy todas sus características tienen derecho de autor. 

 

El negocio fue creciendo muchísimo, siempre en aumento y de manera sostenida, ya que la marca fue dándose a conocer desde diferentes espacios y puntos de venta en todo el país. Durante el camino, los desafíos fueron muchos, sin duda, pero Dani lo describe como un proceso de gran crecimiento personal y profesional, en el que se ponen sobre la mesa todas nuestras fortalezas, debilidades, oportunidades y el deseo propio de ir detrás de lo que nos conmueve. 

 

Emprender es la única forma de darle luz a eso que creamos, que imaginamos y que tiene por delante un camino. ¿Cuál? No sabemos, pero si no nos animamos, no lo vamos a descubrir. Como digo siempre, los melones en el carro se acomodan andando. Una vez que empezamos a andar, se acomodan las cosas y nos acomodamos nosotros con la idea, con el proyecto.

Si tuviera que dar un consejo profesional a quienes están empezando, diría que siempre es bueno rodearse de equipos de trabajo interdisciplinario, detectar nuestras fortalezas y, por sobre todo, nuestras debilidades para sumar a otras personas que nos ayuden a materializar la idea y el proyecto. Creo que es mucha la gratificación”.

 

 

No Kiss Baal: emprender la autoconexión

 

No Kiss Baal

Flor y Ana son dos hermanas que empezaron en el año 2016 a hacer Terapia Postural Activa (TPA). Juntas son las creadoras de los mats de yoga sustentables No Kiss Baal.  

 

Comenzaron su trayecto emprendedor hace un par de años y, en febrero de 2021, lanzaron a la venta el primer producto. No Kiss Baal surge a partir del concepto de regalarte un momento en el que te priorizás, te cuidás y dejás de lado la rutina y el ruido del día para liberarte de las cargas. El impacto en la salud no tiene fin: no hace falta practicar yoga,  pilates o TPA, ya que el beneficio más notorio es el de la relajación porque tiene un efecto anti-estresante. Según Flor y Ana, “desde el momento en que te levantás a la mañana y te tomás 10 minutos para respirar, agradecer, estirar, ya es un día ganado”

 

Su crecimiento fue paulatino. “Hay que tener mucha paciencia y te tiene que gustar mucho lo que estás haciendo para no desanimarte”. En su recorrido, se encontraron con que el desafío más grande era concientizar al público. Hay mucha tecnología detrás de un buen MAT que, además de antideslizante y resistente, es ecológico y, por esas razones, no resulta un producto económico. Otro desafío fue el de competir con grandes marcas, algo que les pasa a todos los emprendedores. Pero Flor y Ana tienen algo bien en claro: se emprende de a poco y lo importante es disfrutar de todo el proceso de aprendizaje. En su experiencia, la gente que conocieron por medio de este trabajo fue amorosa y agradecida, y hacen algo que les gusta tanto que lo quieren compartir con otras personas. 

 

Si sale mal, no pasa nada. La vida es una sola y hay que intentarlo y no quedarse con las ganas del qué hubiera pasado si ....”.

 

Rama Somos: dejar la zona de confort para ir por lo que apasiona


Rama Somos

Como amigas, Emilia e Inés siempre compartieron la pasión por la naturaleza, las plantas, la tierra y el cuidado del medioambiente, y un día, decidieron empezar a contagiar a sus amistades y familiares las ganas del proceso mágico de compostar.

 

Más tarde, durante la pandemia del 2020, cofundaron Rama Somos, un proyecto sustentable que vende composteras de plástico reciclado y concientiza sobre la importancia de cambiar nuestros hábitos para reducir el impacto ambiental. Arrancaron muy de a poco, fueron creciendo lentamente y, cuando se dieron cuenta de todo lo que demandaba el emprendimiento, tuvieron que dejar sus trabajos anteriores para dedicarse de lleno a eso.

 

Ine nos cuenta que trabajó muchos años en un subsuelo, sin ventanas, y Rama Somos implicó un cambio rotundo porque le permite estar en contacto con el aire libre. “Pierdo la noción del tiempo cuando estoy con la tierra, las plantas, las semillas… creo que eso es la pasión, cuando no tomás dimensión de las horas que pasan”.

 

Al haber empezado con esto, Emi siente que creció como persona y que cambió su calidad de vida porque funciona mejor y se conecta más con lo que realmente le hace feliz.

 

Le ponemos un montón de nuestro tiempo, pero nos encanta y apasiona. Estamos trabajando en algo que no solo es vender un producto, sino cambiar el hábito de la gente”.

 

 

¿Cómo cambia nuestra vida cuando decidimos dedicarnos a lo que nos apasiona? Dar el primer paso puede resultar vertiginoso, pero sin duda, el camino emprendedor está lleno de recompensas. Como dicen las chicas de Rama Somos, “si te apasiona realmente y le dedicás mucho trabajo, va a funcionar”. ¿Te animás?