Emociones: ¿cómo impactan en tu bienestar?
Las emociones son reacciones naturales en respuesta a lo que sucede en tu entorno. A lo largo del día, podés sentirte de diferentes maneras. La intensidad de estos estados puede variar. La forma de sentir y expresar lo que te pasa es tan individual e irrepetible como las personas que existen en este planeta.
Es fundamental que puedas manifestarlas. Existen diferentes formas de hacerlo: podés hablarlo con amigos, familiares o un profesional de la salud mental. También, podés aprovechar tus momentos a solas para reflexionar, reír o llorar. Esto te va a ayudar a sacarte ese peso o presión en el cuerpo y sentirte mejor.
Según la OMS, la salud mental es un estado de bienestar que permite hacer frente a momentos de estrés en la vida y desarrollar habilidades como, por ejemplo, trabajar y aprender de manera adecuada.. Es esencial para el progreso individual y comunitario.
En Argentina, 1 de cada 3 personas tiene algún tipo de problema relacionado con su salud mental a partir de los 20 años. Por esta razón,la prevención resulta de suma importancia para reducir los riesgos.
¿Cómo mantener una buena salud mental?
- Sostené una alimentación sana.
- Dormì, al menos, 8 horas por día.
- Realizá actividad física de forma regular.
- Hablá de tus emociones con alguien de tu confianza.De ser necesario, buscá ayuda profesional.
- Hacé actividades recreativas.
¿Qué es la Inteligencia Emocional?
Se trata de la capacidad para reconocer emociones propias y ajenas. Significa que es posible regularlas y comprenderlas. Además, ayuda a conectar de forma empática con otras personas, lograr comunicaciones efectivas, resolver conflictos y expresar sentimientos.
¿Cómo podés ayudar?
El Ministerio de Salud hace las siguientes recomendaciones para acompañar a una persona con algún tipo de padecimiento mental:
- No temas relacionarte con ellas.
- Respetá las diversas formas en las que expresan sus sentimientos.
- Escuchalas, prestá atención a lo que te dicen.
- Acompañalas a ellas y a sus familias.
- Llamalas por su nombre y no por la enfermedad que padecen.
- Tené en cuenta que cualquiera puede atravesar un padecimiento mental. Puede ser un amigo, un familiar, o incluso podés ser vos.