Dismorfia corporal: ¿qué ves cuando te ves?

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La aceptación de nuestro aspecto físico, a veces, puede verse afectada por las redes sociales por el uso de los filtros en las fotos y videos que se publican o al compararnos con los demás. Para algunas personas, esta preocupación se convierte en un problema mayor llamado Trastorno Dismórfico Corporal (TDC).

¿Qué es el TDC?

Es un tipo de trastorno obsesivo-compulsivo de la imagen corporal. Consiste en una preocupación exagerada por un defecto, ya sea real o no, sobre el cuerpo o la apariencia y genera comportamientos como mirarse de forma constante en el espejo o buscar cualquier alternativa para disimular o modificar el supuesto desperfecto. Esto puede poner en riesgo tu salud o llegar a activar cuadros depresivos y fobias sociales. El tiempo que se le dedica a estos pensamientos negativos interfiere en el autoestima, las emociones, la calidad de vida y la capacidad de llevar a cabo las actividades diarias.

¿Cómo detectarlo?

Estos son los síntomas o signos más comunes de las personas que tienen TDC:

la percepción distorsionada sobre ellas mismas,
el desprecio al dialogar sobre su aspecto,
la descripción poco atractiva de su apariencia.

La frecuencia de estos pensamientos negativos puede causar:

temor a ser vistas, juzgadas o ridiculizadas,
total aislamiento social,
vergüenza o asco de ellas mismas,
depresión, enfado y ansiedad.

¿Cómo impactan las redes sociales en la imagen corporal y la salud mental?

En la última década, el crecimiento de su uso tuvo un efecto importante en las personas, lo que aumentó la detección de este trastorno.

La disposición de distintos filtros que alteran de forma leve o exagerada la apariencia e incluso la posibilidad de modificar o eliminar imperfecciones, hace que cada vez sean más los usuarios en busca de un modelo de belleza hegemónico.

Las comparaciones y comentarios en las publicaciones también pueden actuar de manera negativa en personas con baja autoestima. La dependencia a las reacciones del afuera tiende a reforzar inseguridades, miedos y ansiedad. Si una publicación no genera comentarios positivos y un número considerable de “me gusta”, se genera un efecto depresivo en la persona.

¿Qué se debe hacer?

Si detectás signos compatibles con TDC, es fundamental el acompañamiento terapéutico y trabajar en la reducción de síntomas depresivos, la percepción de sí y la autoestima.

Buscá ayuda. Realizá una consulta médica con un especialista en psicología. Accedé al listado de profesionales disponibles ingresando a nuestra Cartilla.

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Evitá compararte con los demás.

Cada persona tiene su propia belleza y nadie más que una misma puede definirla.
Recordá que las redes sociales no siempre reflejan la realidad.

Muchas de las fotos que se comparten suelen estar editadas y no representan el aspecto físico de forma natural.
Limitá el uso de los filtros.

Divertite utilizándolos, pero evitá acostumbrarte y aplicarlos a diario. Es importante aceptar tu apariencia sin alteraciones.
Hablá con quien sientas confianza.

Si algo sobre tu aspecto físico te genera incomodidad, hablá con una amistad o un familiar. Compartí tus preocupaciones para aliviar la presión.
Fortalecé tu amor propio.

Pensá en aquellas cosas que te gustan o te hacen sentir orgullo. Hacé una lista y agradecé lo que sos, destacando todo lo bueno que tenés y hay en vos.
Trabajá sobre tus pensamientos automáticos.

Tomá conciencia y recordá tus fortalezas. Impedí que las ideas negativas nublen tu perspectiva.
Pedí ayuda.

Si sentís que tus pensamientos están fuera de control, realizá una consulta médica con un profesional de la salud mental para preservar tu bienestar.

Fuente: equipo de especialistas en Salud Mental, Macro Psicología.