Los niveles de polipropileno en el ecosistema son cada vez más altos. Ya se encuentran en la fauna silvestre y en las zonas más alejadas del planeta. Te contamos en esta nota todo sobre este grave problema para que puedas crear y transmitir conciencia sustentable y 6 ideas para que reduzcas al mínimo el uso del plástico.
En las últimas décadas, el plástico se transformó en una de las amenazas más grandes para nuestro ecosistema. Años atrás, un estudio sobre la invasión del polipropileno en entornos naturales, dio como resultado que este material ya invade zonas recónditas de nuestro planeta, como el Everest, y el ecosistema ártico, además de haber ingresado en el organismo de animales como tiburones y pingüinos. También se encontraron restos sintéticos en heces y placentas humanas, lo que ya advertía sobre la invasión de este material tóxico, no solo visualmente en el entorno natural, sino a nivel microscópico.
¿Qué podemos hacer para revertir esta realidad? Leé la nota completa para entender todo sobre este grave problema, saber evitar el contacto con el polipropileno y concientizar a los demás sobre el presente límite que vivimos
La invasión del microplástico
Las fibras sintéticas ya forman parte de todos los ecosistemas. Lo que fue una amenaza global ya es una realidad comprobada por distintos estudios que afirman que estos residuos invadieron regiones remotas y despobladas como el Polo Norte y el monte Everest, afectando su frágil equilibrio.
Los microplásticos en especies marinas no es un problema nuevo, ya se había detectado años atrás, más alarmante es que estos componentes tóxicos empiezan a tomar omnipresencia en los ecosistemas oceánicos. Los fragmentos de tamaño inferior a los 5 milímetros de longitud entran en la cadena alimenticia a través de pequeños peces, invertebrados y otros organismos filtradores que son depredados posteriormente por especies más grandes.
Hace tres años, un equipo de investigadores de la Universidad Griffith, de Australia, descubrió que el kril antártico, un crustáceo que se alimenta de fitoplancton, ingiere pequeños fragmentos de plástico y los excreta en forma de residuos diminutos, denominados nanoplásticos, lo que sería una invasión devastadora e indetectable para todo el entorno natural.
En el caso del monte Everest, el más alto del planeta, se hallaron distintos tipos de fibras sintéticas, como poliéster, acrílico, nylon y polipropileno a más de 8.000 metros de altitud. Oficialmente el punto terrestre más alto al que llegaron los microplásticos.
Una advertencia ignorada
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente informó, una vez más, que la contaminación causada en el ecosistema está causando estragos irreparables, y no solo en el entorno natural, sino en la economía y el clima. Con estos niveles de polución, se prevé que para el 2030 se duplique el efecto devastador en el medio ambiente. Lo calificaron como una “catástrofe mundial”, que sólo tiene posibilidades de ser remediada en la medida que se tomen medidas reales e inmediatas contra la producción de polipropileno. El doctor Dick Vethaak, coautor del estudio dijo, “sabemos que el plástico está en nuestro cuerpo, pero ¿a dónde va y qué hace?”, señaló el investigador.
6 acciones reales y visibles que podés hacer desde tu lugar
1| Da el primer paso
Es común creer que, en una situación global y de tanta gravedad como esta, nuestro aporte no vaya a tener incidencia. Cuando un problema no tiene una solución visible a corto plazo, los esfuerzos disminuyen por la sensación de vivir una causa perdida, pero nada es más falso que esa ilusión negativa. Tu aporte es fundamental y, por pequeño que parezca, puede contagiar a los demás. El primer paso es el más difícil de todos, pero es clave para mostrar a quienes no tenían esperanza, que existe una salida a lo que aparentemente era irreparable.
2| Intentá consumir responsablemente
Tu rutina sustentable empieza en el momento que decidís qué consumir y cómo hacerlo. Nuestro planeta tiene más residuos plásticos de los que puede soportar sin alterar sus ecosistemas y sin que sea una situación irreversible., Por eso, te proponemos estas medidas positivas que van a reducir tu consumo de polipropileno al mínimo:
- consumí la menor cantidad posible de embotellados o hacelo con las de menor grosor que, además de tener menos producto nocivo, son más fáciles de reciclar.
- preferentemente utilizá agua de chorro de la red o filtrada.
- no compres bolsas o empaques para hacer tus compras, intentá suplirlas con las de tela o materiales biodegradables.
- no uses plásticos de un solo uso como sorbetes, platos y cubiertos. Recordá que, además de ser contaminantes, desprenden fibras microscópicas que ingresan a tu sistema digestivo.
- cuando puedas comprá comida a granel: tienen menos empaques y son más económicos.
- reemplazá tus tuppers por recipientes de cristal o acero inoxidable: menos polipropileno, y más salud para vos y tu familia.
- cambiá tus broches de plástico por los de madera.
3| Separá tus residuos
Vas a dedicar casi el mismo tiempo y esfuerzo al tratamiento de tus residuos personales, y además de reciclar vas a educar desde el ejemplo. No es más que estar un poco más organizado, casi sin recursos y esfuerzos extra: en un recipiente colocá los húmedos orgánicos, en el otro los plásticos y cartones secos. Incluso, solo con esa pequeña acción vas a estar a un paso de poder hacer tu propio compostaje.
4| Educá con el ejemplo, ¡y publicá tus acciones sustentables!
Somos lo que hacemos. Tu acción es la mejor forma de expresar una idea. Nada es tan real, visible y sincero, como el acto de amor de cuidar a tu planeta y a tus seres queridos. Las medidas sustentables rutinarias y constantes son las que más impacto tienen. Además, hacen reflexionar a los demás sobre la obligación moral de ser parte de un cambio tan necesario. ¡Y no te olvides de publicarlo en tus redes para contagiar tus ganas a los demás! ¡Hacé que tu esperanza de cambio se haga sentir!
5| Hablá del cuidado de nuestro planeta con los más chicos
La conciencia sustentable ya es parte de la educación formal en muchos centros de estudios, y vos lo podés reforzar desde la palabra en tu círculo familiar. Se enseña en las escuelas y se educa en el hogar. Estamos en un momento clave de nuestra historia en el que tenemos que cambiar el sentido de nuestras acciones para poder dar a nuestros afectos más chicos una oportunidad de vivir en un mundo como el que nosotros heredamos.
6| Colaborá con alguna ONG
Existen muchas que concientizan sobre el uso responsable del plástico y recuperan elementos contaminantes de nuestro ecosistema. Rastrean zonas invadidas por materiales sintéticos y sanean la tierra y aguas contaminadas. Luego del reciclado fabrican placas de madera sintética para distintos usos, colaborando con comunidades de menos recursos. Te recomendamos algunas de ellas:
Organización Marítima Internacional / www.imo.org
GREENPEACE / www.greenpeace.org
UNICEF / www.unicef.org
UNESCO / www.unesco.org
Nuestra campaña sustentable Credencial Digital
Durante el 2019, como parte de nuestra estrategia de gestión sustentable, en OSDE presentamos la credencial digital que te permite acceder a nuestros servicios sin necesidad de utilizar la de soporte plástico. Con ella, al igual que con la tradicional, podés atenderte en los centros médicos, en una guardia, en consultorios o en farmacias de todo el país.
Con esta decisión, en OSDE buscamos contribuir con uno de sus objetivos fundamentales en cuanto al compromiso con el medioambiente: el de reducir. En este caso conseguimos disminuir el consumo de plástico de la credencial y de su packaging, como así también de todos los recursos necesarios para su elaboración, evitando la reimpresión para casi 1.600.000 socios, quienes nos acompañaron en el camino de la sustentabilidad. Pero la iniciativa debía ir por más y avanzar en otro de los lineamientos que hace a la estrategia de medioambiente de OSDE, el reciclado.
Así, para cerrar el círculo y darle un destino responsable a las credenciales plásticas vencidas, en OSDE brindamos a nuestros socios y colaboradores la opción de recupero y reciclado de las credenciales a través de sus buzones de gestión ágil ubicados en sus oficinas y centros de atención de todo el país. Esta acción forma parte de un proyecto de economía circular, en alianza estratégica con la Asociación Civil Centro Basura Cero, encargada del tratamiento adecuado y responsable de los distintos materiales que componen la credencial.
El cambio que necesitamos es posible, y solo puede nacer de cada uno, desde las acciones más pequeñas que educan, dan esperanza y movilizan a quienes creen imposible un nuevo rumbo. Hagamos de nuestro mundo uno mejor, desde nuestra rutina, cuidándonos a nosotros y a nuestros afectos.
Referencias
-https://www.un.org/ruleoflaw/es/un-and-the-rule-of-law/united-nations-environment-programme/
-Organización Marítima Internacional / www.imo.org
-GREENPEACE / www.greenpeace.org
-UNICEF / www.unicef.org
-UNESCO / www.unesco.org
-https://www.centrobasuracero.org/